Las películas siempre tienen un inicio desarrollo y un final, al igual que en la vida real, solo que la diferencia entre estas es que el final en las películas siempre es bueno y lleno de buenos deseos y sonrisas, claro, menos las películas que tratan de innovar y terminan con un triste final.
Hace un tiempo el desarrollo de el final de Señor Cool y mío venia en camino. Podría decir que estábamos juntos por no estar solos, o bueno eso era lo que yo sentía. Si bien me hacia reír ¿eso no era un sentimiento de amor que tienes por tus amigos? ¿Por qué había estado empeñada en tantas semanas en tratar de arreglar todo esto, si bien ya no me sentía cómoda con la situación?
Con Isidora fuimos a ver una película al cine y mientras íbamos en el subterráneo le explique mi situación y que estaba pensando en terminar con esta incómoda situación y darle un fin de una buena vez por todas. Isidora decía que era la mejor decisión que podía tomar y que estaba completamente de acuerdo con mi actitud.
Mientras veíamos la película me fue inevitable pensar en señor cool y en la situación en la que me encontraba ¿estaba con él porque realmente éramos “nosotros”? ¿Existíamos como pareja? ¿Por qué seguir usando unos zapatos que no te hacen caminar segura?
Entonces llegue a mi departamento y una vez frente al computador, converse como todos los días con Señor Haka, si bien siempre pensé que los consejos que me daba eran solo para algún día coger conmigo, ese día me di cuenta que era la persona más sincera con la que me había topado, bueno a excepción de Isidora, Florencia y hasta a Victoria, a las cuales nunca les agrado Señor cool. Siempre decían que él no pintaba ni pegaba conmigo, que era como Chanel junto a Prada. Que esto no llegaría a un buen fin, pero que si era lo que me hacia feliz lo aceptaban.
De vez en cuando, los días de mis crisis sobre qué hacer, le decía a Señor Haka que daría tal plazo si en ese plazo seguía sintiéndome así terminaría lo que fuera que tuviera con Señor cool. Así pase como 3 oportunidades, hasta que ayer Señor Haka me dijo todo lo que pensaba sobre mi supuesta relación y que ya el hecho de que yo le dijera que terminaría todo no me lo creía.
Hay formas y formas de terminar una “relación”, la adecuada y la inadecuada. La adecuada es cuando terminas las cosas cara a cara, y la inadecuada es cuando terminas por cualquier otro medio. Bueno yo elegí la inadecuada, de lo cual no me siento orgullosa. Antes me preguntaba porque la gente termina a veces con una llamada, por un mail, por alguna cosa por el estilo ¿Por qué no eran lo suficientemente valientes para terminar cara a cara mirándose a los ojos? Nunca lo había entendido hasta ayer.
Mi situación ya no daba para más y la verdad ese sentimiento de no saber qué pasará me hacia andar nerviosa y de mal humor. Decidí por ese día terminar con señor cool por ese otro medio. Dije algo como que ya no me agradaba el verlo como al cometa Halley, que sentía que para el valía lo mismo que una amiga, si es que, que ya no quería sentirme más como solo la amiga con la que puedes tirar. En breves palabras que de él ya no quería más.
Un par de minutos después el me contesto que sentía exactamente lo mismo y que lo que teníamos ya era, y la frase típica:”fue lindo mientras duró” ¿había sido algo realmente alguna vez? O ¿solo nos habíamos confundido entre el amor de amigos y el amor de algo más?
En fin, en todas las cosas tienen un final; un final bueno, uno malo, uno de película, unos rápidos, otros lentos y bueno así infinitamente, pero lo cierto es que existen. Y cuando esto pasa siempre están tus amigas con boletos a la mejor playa cercana a Santiago y las maletas en la puerta.
La relación con Señor Cool no termino bien ni mal, ni rápido, ni lento. Solo, terminó.